Las sanguijuelas demoníacas son una especie alienígena parasitaria.
Descripción[]
Ya había muestras de las sanguijuelas demoníacas en el Bestiarium Xenos de la Fortaleza de la Guardia Erioch cierto tiempo antes de la llegada de la Cruzada de Achilus. Estudios posteriores identificaron al organismo como una variante de la Sanguijuela de Córtex, un organismo altamente adaptable. Las sanguijuelas demoníacas viven en colonias de desde una docena a cientos de individuos que trabajan cooperativamente para unirse a criaturas más grandes. A diferencia de las sanguijuelas corticales o los Diablos de Catachán, una sanguijuela demoníaca no puede tomar el control del sistema nervioso de su involuntario anfitrión, pero puede paralizarle y permitir que el resto de la colonia le asalte. Las víctimas son purgadas de cualquier líquido y usadas como viveros para los huevos de sanguijuela. Toda colonia liberará periódicamente a una víctima de la parálisis de modo que la agonía causada por su cuerpo lleno de huevos conduzca al anfitrión a una nueva ubicación antes de que se derrumbe, permitiendo el establecimiento de una nueva colonia. Las infestaciones de sanguijuelas demoníacas han resultado difíciles de erradicar y la inteligencia colectiva de las grandes colonias no debe ser subestimada. Parecen perfectamente capaces de aprender, hacer planes, usar señuelos y establecer trampas. Por ello, mantener a las sanguijuelas demoníacas en el Bestiarium Xenos se ha convertido en un desafío cada vez más difícil.
Fuente[]
- Deathwatch: Rites of Battle (Juego de Rol).