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Veredicto del Certamen de Relatos Wikihammer + Voz de Horus ¡Léelos aquí!

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Inqsello Por orden del Ordo Wikia de la Santa Inquisición, este artículo se considera fuera del Canon Imperial. Se declara carente de toda veracidad y blasfemo; y todo el que lo lea sufrirá purga inmediata. Si usted es el autor, diríjase a las autoridades competentes para someterse a la penitencia pertinente.

Atención: Material No Oficial sin Sello de Calidad Wikihammer

En el mundo imperial de Esperanza, la vida era dura. La atmósfera del planeta estaba ampliamente contaminada y apenas se podía respirar. Un 30% de la población vivía en unas naves gigantescas llamadas Nidos. Solo sobre el cielo, a 9000 metros de altura, el aire era limpio y puro. Las instalaciones para mantener los Nidos contaminaban aun más la superficie del planeta, de modo que, algún día, esos símbolos de esperanza se convertirían en poco más que féretros flotantes.

Las rebeliones eran algo común en Esperanza. Grupos de descontentos se lanzaban a las calles de las Ciudades Colmena para acabar con sus despóticos líderes, pero estos eran brutalmente suprimidos por la Guardia Imperial.

Las rebeliones cesaron tan pronto como llegó un destacamento de Martillos de Wikia, con la tarea de recopilar datos sobre una biblioteca que yacía en una de estas ciudades. Los Martillos tenían el permiso del Gobernador Planetario, que residía en uno de los Nidos. Tras dos días, cuando los Martillos llebavan un 25% de la biblioteca copiada, las rebeliones estallaron súbitamente.

Y no eran las desordenadas turbas que el Gobernador Planetario ya conocía.

Los rebeldes se retiraban rápidamente antes de que la Guardia y los Martillos pudieran contraatacar y destruían instalaciones de depuración de agua y comida de forma muy eficiente. Esta situación se repitió en todas las ciudades y el medio centenar que componía el destacamento de Martillos no daba abasto, logrando apenas un par de bajas enemigas, si bien no murió ningún marine.

Entonces, de repente, el Caos comenzó en Julio.

Sin previo aviso, múltiples Marines Espaciales de origen desconocido, así como numerosos xenos, lanzaron un ataque coordinado a las instalaciones que mantenían los Nidos, a la cabeza de los rebeldes. La mayoría de estos ataques fueron un éxito. La energía que mantenía a los Nidos se redujo súbitamente.

Su líder, un Marine Espacial llamado Lord Raum, lanzó un aviso por todo el planeta:

"Perros del Imperio...bienvenidos a la Tierra"

Para aquellos que vivían en los cielos, eso era ni más ni menos que una declaración de guerra. Los habitantes de los Nidos pronto se dieron cuenta de que flotaban en la incertidumbre.

Creyendo que los rebeldes no podrían acceder a los Nidos, y aún contando con la llegada de refuerzos, pues los Nidos podrian mantenerse en el aire durante unos 20 dias, el Gobernador dio orden de retirar a todas las tropas a los Nidos. Su sorpresa fue mayúscula cuando unas naves Orkas ascendieron desde la superficie cargando rebeldes a los Nidos. Los Martillos se colocaron en posición alrededor del palacio del gobernador, pero los Marines eran hostigados continuamente por ataques de Guardianes Eldar coordinados y apoyados por un Vidente oculto entre las ruinas. Aquel Vidente tenía rencillas personales con el Imperio y había jurado destrozarlo a cualquier precio.

Los Martillos fueron eliminados cuando un grupo de Espolones de Disformidad descendió entre ellos y los arrasó con sus cuchillas. Los pocos supervivientes se alegraron cuando dos Escuadras Tácticas más aparecieron y se retiraron hacia estas. Súbitamente, las dos Escuadras Tácticas recién aparecidas acribillaron a sus hermanos y con la sangre de estos, se taparon el emblema de los Martillos y encabezaron violentamente el asalto hacia el palacio.

Los rebeldes estaban rodeando el palacio cuando en el balcón presidencial surgió una figura tapada en un manto oscuro y embutida en una servoarmadura negra con varias cadenas colgando. El Marine sujetaba al Gobernador del cuello y lo llevaba a rastras al borde del balcón. Detrás de él iba otro Marine, este llevaba una armadura de Exterminador gris e iba revestido con una túnica negra con capucha que le cubría todo el cuerpo salvo los brazos. Portaba un hacha de energía ensangrentada y varios servocráneos rondaban a su alrededor. El visor del yelmo estaba manchado de sangre también bajo su capucha y unos ojos fríos observaban todo a su alrededor. Un pequeño grupo de Martillos que había sobrevivido asaltó el balcón para liberar al Gobernador cuando, súbitamente, surgió alrededor del Exterminador de gris un resplandor cegador y desapareció. Los Martillos siguieron su carga contra el Marine de negro, cuando de repente se vieron arrojados de bruces al suelo. El último de ellos que quedaba con vida vio que el Astartes encapuchado estaba tras ellos, y cómo un resplandor se apagaba a su espalda, antes de morir con el cráneo aplastado por su hacha de energía.

El Exterminador se colocó de nuevo de forma respetuosa tras Lord Raum e inclinó levemente la cabeza en señal de respeto.

- Realmente el nombre de Caminante del Empíreo te va como anillo al dedo -dijo Raum.

El Marine alzó la cabeza:

- Sabéis que no puedo usar este artilugio demasiado a menudo, maestro. No creo que el nombre me pegue tanto.

Un nuevo Marine apareció en el balcón, este era un Bibliotecario por su armadura azul, o lo había sido en otro tiempo. Se colocó tras las dos figuras e inclinándose, dijo:

- El palacio está asegurado. Hasta el último de los perros del Imperio ha caído.

- Bien -dijo Raum complacido-. Ahora ha llegado el momento de hacer historia.

Dirigiéndose ante la multitud, alzó al gobernador y lo colocó sobre el balcón. Su voz resonó como un trueno y no dejó lugar a dudas sobre su determinación:

- Aquí está el causante de toda vuestra desdicha. Dice representar al Imperio que "tanto" ha hecho por vosotros, y tal y como estipula su juramento de Gobernador, debe escuchar vuestras peticiones. Así que... sigamos el juramento: ¡ES TODO VUESTRO! ¡ATIENDE LAS PETICIONES DE TUS SÚBDITOS, ESCLAVO DEL IMPERIO!

Sin más dilación, lo dejó caer sobre la muchedumbre y este se ahogó en un océano de manos que lo hundió en la marea y lo despedazó cual manada de perros famélicos.

La muchedumbre se alzó tras acabar con el Gobernador y clamó de júbilo por su libertador. Entonces el Exterminador volvió a envolverse en luz y a desaparecer. El brillo reapareció en el patio, y la gente se apartó presurosa. El Marine avanzó hacia los restos despedazados del Gobernador y tomó la cabeza, reapareciendo en el balcón del mismo modo que había descendido.

Le cedió la cabeza a Lord Raum, quien la clavó sobre el balcón. Este extendió los brazos y habló nuevamente a la gente congregada.

- Este planeta es libre del cruel yugo del Imperio -dijo-. ¡Que se haga vuestra voluntad!

La gente soltó un grito de júbilo similar al de un sabueso que acaba de capturar a su presa. Lord Raum se volvió hacia el Bibliotecario.

- ¿La biblioteca ha sido puesta a salvo?

- Todos y cada uno de los tomos.

- Perfecto -dijo Raum con aprobación.

El Caminante del Empíreo miró al horizonte un momento y a continuación miró hacia el cielo nocturno.

- Un nuevo río de sangre corre por nuestros pies -y se volvió hacia sus dos compañeros Marines.

Lord Raum se detuvo un momento y tomó un colgante de entre sus oscuras ropas. Lo miró con desdén y lo lanzó al suelo antes de aplastarlo sin ningún miramiento y continuar su camino.

Algunos meses después, el planeta Esperanza fue sometido a limpieza por la Inquisición y los Martillos de Wikia. En el Nido central, los Martillos encontraron en el balcón del antiguo gobernador un colgante aplastado en el suelo.

El colgante tenía el emblema de los Martillos de Wikia.

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