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Khorne medio sin fondo

Cerberus el Rebañacráneos, mascota de los Poderes Ruinosos, patrocina este espacio para honrar a sus demoníacos señores. Pulsa sobre él y te introducirá en los misterios del Caos.

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Los Perros de la Guerra (War Hounds en inglés) fueron la XII Legión de Marines Espaciales que el Emperador creó para la Gran Cruzada. Su Primarca es Angron, el Ángel Rojo, quien al reunirse con ellos los renombró Devoradores de Mundos en honor a su antiguo ejército de gladiadores. Posteriormente se unieron a Horus en la Herejía y se entregaron al culto a Khorne.

Historia[]

Orígenes: Un Mal Necesario[]

"He viajado por las oscuras estrellas durante cinco veces la vida de un hombre común, mucho antes de que nuestro glorioso Emperador me hiciera uno de los suyos, y yo os digo esto: los monstruos se arrastran sobre la destrozada faz de mundos sin número, criaturas tan horribles que pararían el corazón de un hombre solo de verlas, y ese es solo el principio de la auténtica pesadilla, pues no hay mente mortal que pueda abarcar la maldad del alienígena en todas sus formas y diseños. Así que ¿por qué debería sorprender al hombre sabio que en semejante galaxia de horrores la Humanidad necesite sus propios monstruos si quiere sobrevivir?"

Capitán Kalako Jaq Harlock, Comerciante Independiente Autorizado, adjunto como Ojeador a la "sangrienta" 13ª Flota Expedicionaria

En los orígenes terranos de la XII Legión no parece que hubiera ninguna inclinación especial por ninguna tribu o ciudad-Estado a la hora de tomar el influjo inicial de reclutas, como sí la hubo en otras Legiones. No obstante, hay referencias sugerentes que apuntan a una criba psicológica destinada a distinguir a los candidatos más inherentemente agresivos y obsesivamente competitivos, llevada a cabo en un programa experimental previo a la selección de neófitos que pudo haber sido aplicado en un puñado de otras Legiones. Tanto si esto es cierto como si es una mera suposición hecha a posteriori para explicar los hechos evidentes, de los registros supervivientes se induce que la XII Legión fue considerada desde un principio una fuerza altamente agresiva de guerreros irascibles y salvajes.

El primer combate registrado de la Legión fue su empleo como punta de lanza de tropas de choque en la Liberación de Sa'afrik, lanzando asaltos directos de aniquilación contra las fuerzas enemigas, tanto en campo abierto como en fortificaciones, y completando con éxito sus ataques, a pesar de su entonces relativamente escaso número, mediante el puro coraje y la furia de la violencia que podían desatar. Sin embargo, tras sus primeras batallas la naciente Legión parece haber sido mantenida en reserva por el Emperador durante las fases finales de las Guerras de Unificación y toda la reconquista del Sistema Solar, quizás en caso de un repentino revés de la fortuna de la guerra o, como implican ciertas referencias veladas, para ser desatada en caso de deslealtad entre los ejércitos del Emperador. Durante este tiempo, la XII Legión fue mantenida en un estado de alerta permanente, entrenando sin cesar y creciendo constantemente en número, y en las ocasiones en que iban al combate luchaban un salvajismo casi alegre, destrozando a cualquier enemigo que se les opusiera sin piedad ni flaqueo algunos, sin preocuparse de sus propias bajas ni pensar en los riesgos. Se cree que fue durante este periodo cuando el Emperador les dio el apodo de sus "Perros de la Guerra" como tributo a la forma tenaz y salvaje en que habían luchado para pacificar los narco-arrabales de las Colmenas Cephic, y en señal de orgullo por esto el mastín rojo se convirtió en el emblema de la Legión.

Uno de los pocos registros de primera mano de esta época se encuentra en las memorias de guerra del Coronel-Bashar Alves Scorn del XXII Regimiento terrano de Dracos, que luchó junto a la XII durante la Insurrección de Cerberus y que posteriormente se haría famoso como Comandante Imperial de Proximal Secundus.

Las fuerzas insurrectas habían masacrado a las castas gobernantes de la colonia penal excavada en el interior de un asteroide, y a raíz del alzamiento los cerca de tres millones de habitantes esclavizados de Cerberus habían desatado una anárquica revuelta, con luchas y conflictos entre bandas casi continuos. Los intentos iniciales de imponer el orden por parte de las tropas terranas fueron hechos retroceder desordenadamente, pues entre los sublevados se descubrió a un cuerpo de proscritos Guerreros Trueno (creídos muertos desde hacía mucho) que se llamaban a sí mismos los Dait'Tar. Dado que muchas de las Legiones de Marines Espaciales ya estaban asignadas a las primeras Flotas Expedicionarias y en ruta hacia las estrellas, el Emperador envió personalmente a los Perros de la Guerra a Cerberus (y parece ser que no se le escapó la ironía del suceso al hacerlo) con instrucciones explícitas de reclamar la colonia de Cerberus y descargar la ira del Emperador sobre aquellos que le habían desafiado.

A las 3:00 de la Hora Sideral Terrana, los Perros de la Guerra atacaron múltiples puntos de entrada de la superficie del asteroide, y a las 8:08 se recibió una señal del Pretor-Comandante Calyb Hax de la XII Legión que informaba de que Cerberus-Primary había sido devuelta a la obediencia. Cuando el líder de la segunda oleada en espera le preguntó cuántos prisioneros debía esperar encontrar para ponerlos bajo custodia, Hax replicó que nadie le había ordenado que tomase ninguno...

Alves Scorn, que había formado parte de la segunda oleada, dirigió a su Regimiento en la sombría tarea de completar las operaciones de limpieza tras los pasos de los Perros de la Guerra, cazando a los supervivientes ocultos en los túneles y pasadizos, de los cuales se encontraron muy pocos. Posteriormente escribió sobre sus experiencias en sus informes, y recoge más de una vez el hallazgo del cadáver de un Guerrero Trueno acorazado, a menudo rodeado por tres o cuatro Astartes muertos; de cuellos de botella y puestos de defensa convertidos en osarios empapados de sangre, y de docenas y docenas de insurgentes asesinados por detrás mientras huían cegados por el pánico tras abandonar sus armas. El Coronel-Bashar resumió sus experiencias en un tristemente profético comentario:

"No dudo de la sabiduría del Emperador al crear un mal necesario como estos temibles guerreros, ni dudo de su efectividad en combate. Sigue siendo mi ferviente esperanza, no obstante, que aunque pase toda mi vida guerreando por la liberación de la Humanidad, nunca vuelva a ver una carnicería tan inhumana como la que he presenciado en los salones de Cerberus."

Coronel-Bashar Alves Scorn

La Sangrienta Decimotercera[]

A medida que las primeras décadas de la Gran Cruzada progresaban y los primeros Primarcas eran hallados, la XII Legión fue dividida en varios subgrupos independientes, cada uno de varios miles de Astartes. El más grande de ellos, de unos 8000 Perros de la Guerra, junto con varios elementos de asalto y navales como apoyo, fue designado como la 13ª Flota Expedicionaria, aunque rápidamente pasó a ser conocida como la "Sangrienta Decimotercera".

Estos destacamentos fueron enviados como una reserva móvil allí donde la lucha era más dura en los frentes de la Gran Cruzada. Allí sirvieron como tropas de asalto en gloriosas campañas junto a las Legiones de los Ángeles Oscuros, los Guerreros de Hierro (p. ej., en Nove Shendak) y los Lobos Espaciales. En otros lugares proporcionaron el golpe de gracia necesario para romper los puntos muertos que el Ejército Imperial no podía romper por sí solo, lanzando un único ataque furioso que hacía tambalearse a cualquier enemigo. Durante este tiempo los Perros de la Guerra se ganaron una reputación victoriosa, aunque a un alto precio, y se decía que sus asaltos solo podían acabar de dos formas: en masacre victoriosa o en simple masacre, dejando cualquiera de las dos opciones al enemigo incapacitado para resistir más. A pesar de su efectividad, muchos de los que lucharon a su lado les encontraban impredecibles, destemplados y peligrosos para cualquiera que se pusiera en su camino, combatiente o civil. Empezaron a circular rumores de que habían pasado a cuchillo a Regimientos auxiliares humanos que consideraban que les habían fallado en la batalla, y ellos guardaron una distancia cautelosa de las Legiones junto a las que combatían. Se observó que los oficiales de la Legión imponían un código de disciplina inusualmente duro, y sin duda era necesario, pues los mismos Perros de la Guerra podían ser muy irascibles y no era raro ver derramamientos de sangre entre hermanos.

Cada vez más, los guerreros de la XII Legión fueron considerados más adecuados para ser usados en campañas donde el objetivo era más la aniquilación que el sometimiento o la liberación, pues era una tarea a la que los Perros de la Guerra parecían estar perfectamente adaptados. A medida que las Legiones crecían de tamaño y la mayoría de ellas se reunía con sus Primarcas, el papel de refuerzo se volvió menos importante y los Perros de la Guerra fueron reunidos de nuevo bajo el estandarte de la Sangrienta Decimotercera, a la que se unieron varias unidades que, como ellos, se habían ganado una oscura fama más por su violencia descontrolada que por su disciplina militar, o que eran consideradas imposibles de usar en combates en los que se debía reducir el daño colateral al mínimo y el objetivo era la liberación antes que la destrucción. Esta concentración de tropas, centrada sobre el duro mundo volcánico de Bodt, que había sido tomado por los Perros de la Guerra como terreno de entrenamiento unos años antes, incluyó Regimientos de cazadores de cabezas procedentes de mundos salvajes, y brutales pseudohumanos al límite de la desviación genética tolerada. A estos se unieron cuerpos tales como los Titanes de la Legio Audax, en torno a los cuales había caído una sombra de sospecha desde las Masacres de Lorin Alpha, y los poco fiables Clanes Artilleros de Numen, nómadas tecnobárbaros que habían luchado amargamente contra el Imperio antes de ser final y reticentemente sometidos. Al ver los informes de la reunión de fuerzas de Bodt, se dice apócrifamente que el Primarca Sanguinius comentó:

"El Emperador está reuniendo un carnaval de monstruos para su diversión, aunque dudo que cualquiera sobre el que sea desatado le vea la gracia"

Sanguinius

En perspectiva, ahora es evidente que este sangriento ejército estaba siendo reunido por una razón muy particular, y que solo esperaba un nuevo señor que lo dirigiese.

Devoradores de Mundos[]

Tras la reunión de Angron con su Legión, este la renombró como Devoradores de Mundos en honor al ejército de gladiadores que había dejado atrás al ser abducido por el Emperador, los "Devoradores de Ciudades".

Angron hizo extender los ritos sangrientos que había aprendido entre los gladiadores de su planeta natal, e hizo que todos los Marines Espaciales se implantasen unos sistemas similares a los suyos con el fin de convertirlos en máquinas de matar sin miedo ni remordimientos. Esta tecnología era inestable y peligrosa, y además tenía el efecto secundario de provocar ataques de ira espontáneos fuera de la batalla, por lo que el Emperador prohibió su uso tras la Purga de Ghenna (en la que mataron a toda la población del planeta en una noche). A pesar de todo, Angron siguió usándola en secreto.

Esta abducción y este rechazo hacia sus métodos por parte del Emperador hicieron de Angron presa fácil para las tentaciones de Horus, y los Devoradores de Mundos fueron una de las primeras Legiones en traicionar al Imperio durante la Herejía.

Acciones notables[]

[En construcción, disculpen las molestias]

  • Liberación de Sa'afrik (M30).
  • Pacificación de las Colmenas de Cephic (M30).
  • Insurrección de Cerberus (M30).
  • Campaña de Nove Shendak (M30).
  • Asedio de Sarum.
  • Liberación de Alpha Shalish.

Doctrina de combate[]

Berserker14

El combate cuerpo a cuerpo siempre fue el método de lucha favorito de la XII Legión, incluso desde antes de que adoptase el nombre otorgado por el Emperador de Perros de la Guerra. Esto no significaba que la Legión careciese de habilidad y competencia en los combates a distancia o en la guerra blindada y los ataques de apoyo de artillería (de hecho, nada menos que Ferrus Manus, toda una luminaria de la guerra mecanizada, alabó el asalto blindado de los Perros de la Guerra a Aldebaran Septus como el "epítome de la rabia acorazada encarnada"), pero para los Perros de la Guerra tales cosas eran un medio táctico para un fin.

Ese fin era descargar con éxito la fuerza letal de la Legión (sus Marines Espaciales) donde pudiera causar mayor daño, y llegar a las manos con su enemigo en el cuerpo a cuerpo. No hay un signo más claro de esta preferencia por matar cara a cara en la Legión que la preponderancia del armamento para el combate cuerpo habitualmente portado por sus tropas de línea. Además del ubicuo gladius o cuchillo de combate, incluso los Legionarios asignados a las Escuadras de Reconocimiento y a las tripulaciones de tanques solían llevar cuchillas sierra, navajas despellejadoras y bayonetas monoserradas, cuchillos adicionales, hachas y rebanadoras. En las unidades dedicadas específicamente al asalto, esta profusión de sangrientas herramientas de muerte era ampliada por un arma procedente de las tribus tecnobárbaras de Terra: el Hacha Sierra de amplio filo.

Ya antes de caer al Caos, e incluso antes de que Angron introdujera los implantes de combate, la Legión era conocida por su espíritu colérico, hasta el punto de que el Emperador, al inicio de la Gran Cruzada, tuvo que prohibirles diezmar a los Regimientos del Ejército Imperial que no habían cumplido con sus expectativas tácticas.

Organización[]

Como casi todas las Legiones de Marines Espaciales, en su creación la XII Legión siguió el llamado "Patrón Terrano" de organización según dispuso el Officio Militaris al inicio de la Gran Cruzada, pero incluso en este temprano periodo la disposición y el equipo de la Legión mostraban una considerable inclinación por el asalto directo y las operaciones en los letales campos de batalla designados como "Zonas Mortalis" en la doctrina estratégica. Esto seguiría siendo así tras la toma del mando por Angron, y las estructuras organizativas de la Legión permanecieron prácticamente intactas salvo por ser aún más racionalizadas, con sus escalafones (el equivalente a los Capítulos de otras Legiones) compuestos principalmente por formaciones de infantería de línea. Estas eran, por su panoplia y sus tácticas, un híbrido de tropas tácticas y de asalto sobre todo, apoyadas por unidades dedicadas al asalto pesado, como los Exterminadores, y por unidades especializadas, como los escuadrones de Land Speeders.

Esta organización se prestaba a una postura estratégica altamente agresiva y a tácticas beligerantes que, aunque eran extremadamente costosas en términos de bajas, también eran altamente efectivas. Un ejemplo de tal doctrina era su patrón favorito de invasión planetaria: la Legión abrazó rápidamente el uso de ataques orbitales en masa a bordo de Cápsulas de Desembarco para lanzarse directamente al corazón del enemigo sin maniobras previas o preámbulos como primera oleada del ataque. Este golpe repentino y aplastante estaba diseñado para mantener paralizado al enemigo luchando contra esta vanguardia (que a menudo sufría graves bajas), mientras que una segunda oleada de unidades más pesadas y blindados seguía sus pasos y se estrellaba contra las zonas de fuerte resistencia reveladas por la primera oleada. En estos ataques la Legión se lanzaba al asalto con furia asesina, a menudo luchando al mismo tiempo que las naves en la órbita baja lanzaban bombardeos de apoyo peligrosamente cerca, o con Titanes y otras unidades de asedio disparando en medio de la lucha junto a ellos. Mediante estas tácticas el ataque de los Perros de la Guerra superaba cualquier resistencia con pura rabia, arrojándose una y otra vez contra el enemigo hasta que este rompía filas y era destrozado mientras huía aterrorizado.

Jerarquía de mando[]

Como los Perros de la Guerra, la XII Legión era conocida por su dura imposición de la disciplina interna y por el ardiente temperamento de sus Legionarios. El mando dentro de la Legión era obtenido mediante una mezcla de habilidad marcial en el campo de batalla y muestras de liderazgo en el frente, y los especialistas eran distinguidos por su aptitud desde muy temprano. Ningún oficial o rango estaba exento de que se esperase que luchasen tan duro como el resto, no obstante, ni se desanimaba el deseo de luchar mano a mano con un enemigo y matarlo a golpe de espada si la oportunidad se presentaba, ya fuera el Marine Espacial en cuestión un Apotecario, un artillero o un combatiente regular. Comparados con muchas otras Legiones, el orden y la disciplina no eran tan naturales para los portadores de esta semilla genética como se podría esperar: los temperamentos hervían, las ofensas percibidas o reales eran respondidas con furia y la mayoría de las veces con violencia si se atacaba a su sentido del honor. Cualquier oficial de la Legión sabía que se esperaba de él que impusiera sus órdenes por la fuerza si hacía falta, y que castigase a los infractores con sus propias manos, ya que la costumbre de la Legión era que desobedecer una orden en combate conllevaba una sentencia de muerte inaplazable.

Creencias[]

Para la XII Legión la vida misma era la guerra, un conflicto que nunca terminaba desde la cuna hasta la tumba, y las Legiones Astartes eran este concepto en su forma más pura. El fracaso en combate no era tolerado, la rendición nunca era permitida y la piedad era una muerte rápida para un enemigo que había luchado con bravura; los cobardes no merecían más que salvaje carnicería en recompensa por su miedo. Este código militar, simple pero resueltamente brutal, era el centro de la cultura de los Perros de la Guerra y lo aplicaron tanto a sí mismos como a sus enemigos.

Miembros conocidos[]

  • Ibram Gheer - Un respetado Astartes terrano, fue el Señor de la Legión de los Perros de la Guerra durante casi tres décadas. A partir del descubrimiento del Primarca Angron en Nuceria, Ibram Ghreer desapareció por completo de cualquier registro, sin que su taciturna Legión justificase jamás su ausencia. En realidad fue asesinado por Angron en cuanto se presentó ante él para cederle el mando de la XII Legión, debido a su rabia por haber sido apartado de sus hermanos gladiadores por el Emperador.
  • Anchez - Jefe de la sección de asalto. Muerto a manos de Angron después de Kunnar.
  • Hyazn - Oficial de la Legión. Muerto a manos de Angron después de Anchez, junto con dos de sus Portaestandartes.
  • Vanche - Veterano maestro de armas de Ibram Gheer. Muerto a manos de Angron después de Hyazn y sus Portaestandartes.
  • Shinnargen - Capitán de la 2ª Compañía. Muerto a manos de Angron una hora después que Vanche.
  • Khârn - Capitán de la 8ª Compañía de Asalto y oficial de mayor rango de la Legión tras la muerte de todos sus superiores a manos de Angron. Sobrevivió al encuentro con el Primarca, convenciéndole de ocupar su legítimo puesto de comandante de la Legión, y posteriormente se convertiría en su Palafrenero personal.
  • Dreagher - Oficial de la Legión de rango inferior al de Khârn. Acuñó el nuevo nombre de los Devoradores de Mundos en honor a los "Devoradores de Ciudades" que habían luchado junto a Angron en Nuceria.
  • Jareg - Municionador jefe del Escalafón de Artillería.
  • Horzt - Comandante del escuadrón de Stormbirds de la 9ª Compañía.

Apariencia[]

La XII Legión vestía originalmente servoarmaduras azules con hombreras, placas abdominales y mochila blancas, y su símbolo era un mastín rojo rampante con carlanca.

Leer más[]

Lista de Ejércitos de Marines Espaciales.

Lista de Legiones Traidoras y Capítulos Renegados.

Devoradores de Mundos.

Fuentes[]

  • The Horus Heresy I.
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